¿Has pensado en abrir tu propia oficina contable? La decisión de emprender puede entusiasmarte mucho, pero te conviene tener claridad del negocio que deseas iniciar. De esa forma, puedes abordar cada reto con tranquilidad.
Para que te sientas seguro en cada uno de los pasos que debes dar al iniciar tu propio negocio, te contamos qué hacer. En este artículo, abordaremos los aspectos que te conviene atender para lograr el éxito.
Como toda decisión de negocios, tu emprendimiento debe partir de la investigación. Te conviene conocer las implicaciones y consecuencias de iniciar un negocio, así como los compromisos que adquieres.
Como contador debes saber que la permanencia en el mercado va más allá de la apertura de una oficina. Requieres tener clientes y un flujo de ingresos estable que te permitan sostenerte en el tiempo y crecer.
De manera que al planificar cómo fundar tu oficina contable, te conviene hacerte algunas preguntas que son claves para el éxito del negocio. Algunas de las interrogantes para las que debes tener respuesta al iniciar tu emprendimiento son las siguientes:
¿Qué tipo de servicios va a ofrecer el estudio contable? Esto es realmente importante, en especial en una primera firma, ya que es fundamental que te construyas una reputación.
¿Cuál es el perfil de tus clientes? De esa manera, sabrás cómo reconocer a las personas que pagarán por tus servicios.
¿Qué te diferencia de la competencia? En tal sentido, debes buscar qué aspectos te hacen único y por qué te preferirán los clientes.
¿Cuál es tu plan de negocio? Con esta herramienta puedes establecer cuáles serán las acciones críticas para el éxito de la oficina de contabilidad.
¿Cómo medirás el éxito de tu negocio? Esto es fundamental porque necesitas conocer si te estás acercando a los objetivos del negocio.
Una oficina o estudio contable es un negocio que se encarga de labores relacionadas con la gestión administrativa de una empresa. En muchos casos, además de contadores, la conforman abogados con la intención de ofrecer el servicio más completo a sus clientes.
En líneas generales, este tipo de negocio proporciona servicios de contabilidad a otras empresas. De manera que se ocupa de registrar, organizar, analizar las transacciones financieras y realizar informes de las mismas.
Una parte del quehacer de este tipo de negocios se relaciona con temas tributarios. Esto implica tanto cumplir con las obligaciones fiscales como proteger los intereses de sus clientes.
Por otro lado, este tipo de empresa puede dar servicios de auditoría así como de contabilidad forense. Frecuentemente, prestan servicios a personas independientes que laboran por cuenta propia.
Adicionalmente a los servicios que hemos referidos hasta ahora, los contadores pueden hacer inventarios, cobranza y nóminas. También, ayudar a otros a formalizar un negocio.
A pesar de los conocimientos que tengas, siempre es importante contar con especialistas que te puedan respaldar al iniciar un negocio. En ese sentido, empresas como La Contadora te ofrecen asesorías y cursos para afinar tus habilidades para la empresa.
Una oficina contable depende de su credibilidad. Por ello, es muy importante que tu empresa esté constituida correctamente siguiendo lo establecido en el marco legal. Es por ello, por supuesto, que todos los asuntos deben estar en orden, según las prioridades.
Debes realizar la escritura de Constitución de Sociedad con todas sus especificaciones. Luego debes inscribirla en el Registro de Comercio y hacer la correspondiente publicación en el Diario Oficial.
Por supuesto, debes obtener el RUT (Rol Único Tributario) y tramitar los documentos de Iniciación de Actividades. En honor a la profesión, debes asegurar todos los documentos tributarios. Algo muy importante, no olvidar la afiliación al gremio de contadores.
A pesar de ser un profesional del sector, estos trámites pueden ser retadores. Por ello, siempre conviene contar con expertos que te ayuden en
este proceso. La Contadora pone a tu disposición cursos ya grabados para esto, así como asesorías para facilitar este tránsito.
Un aspecto que te conviene atender es la claridad de un plan de negocios para tu oficina contable. Este permite documentar los objetivos y planes. Allí puedes describir todos los elementos relevantes de la empresa.
En tal sentido, cubre elementos como la declaración de la misión de la empresa, vista a veces como una gran tarea. Así como el propósito o visión, la cual se refiere a aquello en lo que aspiras se convierta el negocio.
Adicionalmente, debe establecer los objetivos que pretendes alcanzar con tu negocio, así como las estrategias a groso modo para poder lograrlas. En el plan de negocios, debes establecer un plan de comercialización, así como proyecciones financieras realistas.
El plan de negocio sirve como guía a todos los integrantes de la empresa, así saben que van en la dirección establecida. También recuerda que debes incluir un cronograma para que puedas comparar el desempeño con lo esperado.
Por otro lado, debes tener en cuenta que la constitución de la empresa y su puesta en marcha requiere recursos económicos. Por ello, es fundamental que tengas claridad sobre la fuente de esos fondos.
Estos pueden provenir de tus propias finanzas o bien de aporte de otros. Estos otros patrocinadores van a pedirte que les cuentes cómo y en qué vas a gastar los recursos, además de cómo recuperarás la inversión.
La estructura organizativa del estudio contable es sumamente importante. Seguramente, requerirá de asistencia, así como la colaboración de colegas para sacar adelante tu emprendimiento. Por ello, es conveniente que tengas definidas las líneas de mando.
Por un lado, es fundamental que delimites los procesos y tengas claro quién hará qué cosas. Así te puedes asegurar de que están cubiertas las funciones importantes y que la empresa fluye con facilidad.
En la medida en que haces esto, puedes conocer cuántas personas necesitas, así como qué cargos requieres llenar en la oficina. Un aspecto que debes mantener siempre en mente son los salarios, por lo que es preciso saber de dónde saldrán los recursos financieros.
Por otro lado, es importante que tengas claro cuál es tu volumen de trabajo inicial, porque podrías empezar con un pequeño equipo. Luego, en la medida en que se incremente la cartera de clientes, el personal crecerá junto a ella.
Ahora bien, para que lleguen clientes a tu oficina contable puedes empezar con los conocidos que tengas. Sin embargo, un negocio saludable requiere un flujo constante de nuevos prospectos.
De manera que debes desarrollar una estrategia de marketing. Esto parte de la construcción de una marca, cubriendo aspectos como un logo y dando a conocer lo que haces. Así que necesitas un mensaje claro, construido especialmente para el perfil de los clientes.
En tal sentido, debes ser muy específico con tu público objetivo, sólo de esa manera puedes crear una conexión con ellos. Así, identificar sus necesidades y crear soluciones que faciliten que las personas prefieran tus servicios.
Para establecer una reputación te conviene tener presencia en Internet. Esto lo puedes conseguir mediante una página web. Sólo recuerda que debe estar construida en función de lo que busque tu público objetivo.
Al mismo tiempo, es importante que definas la presencia que tendrás en redes sociales, puesto que ellas te permitirán la exposición de tu marca distintiva. Sin embargo, este tipo de actividades debe responder a una estrategia de posicionamiento. En especial, si pagas por publicidad para la empresa.
Por ello, es importante apoyarse en especialistas que te puedan ayudar, pues del flujo de clientes depende que el negocio se sostenga en el tiempo. Este es un factor estratégico para el éxito del estudio contable.
Los negocios son tan grandes como su reputación. Cuando fundas tu primera oficina contable eres nuevo en el mercado y necesitas construir una imagen de eficiencia y profesionalismo.
Entonces, te conviene iniciar con referidos o personas que conozcas para ofrecer tus servicios y construir una reputación sólida. También puedes establecer alianzas en las que ofrezcas beneficios por ese espacio de difusión.
Definitivamente, el estudio de contabilidad requerirá de fondos para funcionar. Por ello, puedes pactar colaboraciones con socios estratégicos; no obstante, en muchos casos, la reputación es el activo más valioso.
Impulsar tu marca y fidelizar a los clientes que ya posees es la plataforma de lanzamiento. Simultáneamente, la reputación se alimenta de la cantidad de clientes. Cuanto más reconocidos son ellos, mayor será el beneficio en términos de percepción para que el nombre de la empresa esté asociado a sus marcas.
Cuando encuentres una oportunidad de alianza que te convenga, debes llevar a cabo un proceso para consolidarla. Una manera de iniciar es definiendo las necesidades, tanto las tuyas como las del posible aliado.
Siempre es importante investigar a los colaboradores. Por ello, a pesar de la confianza, indaga cuál es la reputación y las acciones de tus aliados. De esa forma, evitas sorpresas desagradables. Recuerda que tu reputación queda ligada a la de ellos.
Una vez que estás convencido de la alianza, es importante establecer un proyecto de colaboración. Así queda claro lo que espera cada uno, así como los indicadores de logro al alcanzar los resultados.
Sin duda, un factor clave de éxito es seleccionar el mejor equipo para la tarea de colaboración o alianza. Y finalmente, recuerda medir los resultados, sólo así sabrás que vas por buen camino o que requieres hacer ajustes.
Tu oficina contable es una empresa y como tal requieres cuidar la gestión financiera y administrativa. De un eficiente manejo de estos aspectos depende la rentabilidad del negocio.
Al emprender en este negocio, haciendo honor a la profesión, debes apegarte a lo planificado. Esto aplica tanto a las acciones como a los gastos e inversiones. El cumplimiento de los aspectos financieros son claves para la empresa.
En tal sentido, te corresponde asegurar el flujo de efectivo. Esto implica el cumplimiento con todos los aspectos que ya hemos mencionado, así como la claridad de que cada acción de la empresa implica costos.
Del mismo modo, debes mantenerlo en mente cada vez que tomes una decisión. Hacerte la pregunta: ¿de dónde saldrán los fondos para llevar a cabo cada proceso? Esto abarca desde la contratación de un nuevo personal hasta el almuerzo de negocios con un cliente.
La administración de recursos debe responder a lo planificado y en cada caso que aparezca un imprevisto debes buscar los fondos necesarios. Por ello, es importante que habilites una cuenta para este tipo de contingencias.
También es muy conveniente que hagas un análisis concienzudo de tus prioridades, sobre todo cuando estás iniciando un negocio. En especial, porque te toparás con muchos espacios que son nuevos para ti.
Por ello, siempre es una buena idea contar con la asesoría de especialistas en el proceso de emprender, así te sentirás más seguro. En La Contadora ponemos a tu disposición a los mejores.
Cuando estés listo para fundar tu primera oficina contable debes asegurarte de atender a los aspectos que la llevarán al éxito. El proceso se inicia con una detallada investigación, una planificación de lo que harás y lo que quieres lograr.
Si ya sabes lo que deseas conseguir emprende la acción, manos a la obra. En tal sentido, puedes impulsarte con tus propios recursos o apoyarte en expertos. Visita La Contadora donde disponemos de especialistas que puedan ayudarte a dar este paso.
Te asesoramos con los aspectos legales para que construyas la empresa de contabilidad que deseas. Igualmente, te dará asesoría en las diversas áreas a las que debes prestar atención para lograr su implementación con éxito.
Con nosotros, puedes emprender con tranquilidad porque te acompañamos en cada paso. Así puedes concentrarte en lo central del negocio, mientras allanamos cualquier obstáculo que se presente.
Además, en nuestra escuela virtual ofrecemos muchos cursos para profundizar los conocimientos necesarios para alcanzar el éxito en la empresa. Cotiza con nosotros y abre la puerta a un mundo de oportunidades para tu negocio.
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